Con la llegada del invierno, todos los toreros, sin excepción, realizan su “obligada” visita al sastre. Es el momento de renovar “vestuario”, pensando ya en los compromisos de la próxima temporada. El traje de luces envuelve al hombre y al torero en un momento y unas circunstancias muy especiales y determinadas, de ahí que lejos de ser algo accesorio, sea uno de los componentes más importantes de la Fiesta.
Traje de luces bordado en oro
El traje de luces está formado por la chaquetilla, la taleguilla y el chaleco, normalmente siempre del mismo color y que pueden estar bordados en oro, plata o azabache, lo que no impide que en ocasiones luzcan combinados. También forman parte de la indumentaria de un torero la camisa, siempre blanca, el corbatín y las zapatillas, siempre negras, planas y adornadas con un lazo en su parte superior.
Mención aparte merecen las medias, pues bajo las tradicionales rosas de seda visten unas blancas de algodón.
Otros accesorios de los toreros son la castañeta y la montera.
En el vídeo que hoy publicamos el matador de toros salmantino Eduardo Gallo y Antonio López Fuentes, sastre de la Casa Fermín, nos explican el proceso de confección de un traje de luces desde que el torero lo imagina hasta que lo estrena en una plaza de toros.